Un fin de semana un poco agridulce. Aunque mirándolo en frío quizás haya más motivos para el dulce que para el agrio, el caso es que tuve malas sensaciones y me dejó un regusto un tanto amargo.
En principio no tenía previsto participar en esta prueba de Esgos pero al final por distintas circunstancias hubo cambio de planes y así lo hice. Las carreras de montaña son una especialidad dentro del atletismo a la que no se le da la importancia que se merece (a diferencia de las carreras por montaña que están siendo mejor explotadas por las federaciones de montañismo) prueba de ello es que este campeonato gallego ha coincidido en fecha con el campeonato de España celebrado además en una localidad relativamente cercana como es Tineo (Asturias) Una pena porque creo que este tipo de carreras tienen su propio 'nicho' (por utilizar un símil de la ecología) al centrarse en carreras 'corribles' a diferencia de las pruebas FEDME con un componente más montañero.
Esta subida no era terreno desconocido ni mucho menos, ya había participado en otras 3 ocasiones, 2 de ellas con el mismo recorrido actual, así que el resultado no se podría achacar al factor sorpresa. Sabía lo que había, el tipo de terreno, y que el perfil se adapta bien a mis características.
De 570 m a 1163 en 13 Km.
Es verdad que en mi última participación llegaba en mejor forma que ahora y que la había medio preparado, incluso semanas antes había logrado un 6º puesto en un trail de Portugal. De aquella edición se había instalado en mi mente la idea de que se trataba de una prueba fácil (y en realidad si lo es si la comparas con las carreras por montaña, pero no deja de tener su componente de dureza) y este quizás fuera uno de los grandes errores.
La mañana la verdad tampoco es que ayudara demasiado a la hora de hacer ganas de correr: cielo completamente cubierto, lluvias intermitentes y aviso de que en la cima estaban soportando condiciones de mucho viento y frío. Tuve dudas de que ropa llevar, sobre si llevar camiseta interior o no pero al final me decidí por el no porque subiendo malo será no pasar frío.
A las 10:30 se da la salida a unos 250 participantes. Desde el primer metro se empieza subiendo aunque el principio es todo por asfalto. La dificultad de esta carrera es que si bien no puedes salir muy fuerte porque luego lo pagas tampoco puedes salir muy atrás porque luego, por las características del recorrido, resulta muy complicado adelantar.
En la primera parte, hasta el monasterio de San Pedro de Rocas o quizás un poco menos voy con Pirri, a un ritmo bastante cómodo aunque con sensaciones no muy buenas. De todas formas me pasa muchas veces que me cuesta meterme en carrera y hasta que no llevo un buen rato corriendo no empiezo a carburar.
La temperatura era bastante buena pero la humedad era muy alta, en 2 km ya llevo la camiseta totalmente empapada y el dorsal (de papel, malo malo, el único pero que se el puede poner a esta carrera) se me empieza literalmente a deshacer.
- Sólo faltaba que luego llegue a la cima y me descalifiquen por no llevar dorsal.
Continúo la carrera, esta vez en compañía de Iván del Limiactiva entre otros. El terreno no es muy complicado pero la combinación de barro en las zapas y roca mojada hace que no haya mucha tracción.
Alcanzamos a Roy que esá pasando un mal momento y también a Suso que decide pararse y esperar. Yo sigo incómodo de sensaciones pero por unos momentos me veo concentrado en la carrera y parece que las cosas van a mejor.
Llegamos a un tramito largo de pista llana que sirve como respiro antes de afrontar la subida hasta la capilla de la Virxe do Monte. Hasta ese momento ya había tenido que caminar en alguna ocasión pero pensaba que si la última parte del recorrido la hacía bien aún podría remontar unos cuantos puestos porque veía una larga fila de corredores muy cerca.
Nada más lejos de la realidad ya que, si bien afronto la primera parte de la subida corriendo luego enseguida me paro a caminar. No sé muy bien que me pasa, no llevo los músculos muy cargados, simplemente me siento cansado y no tengo fuerzas.
Como recuerdo otros años la manera en que subía por aquí mis ánimos caen en picado y, como si fuera el mito de Sísifo, desde ahí hasta meta me toca empujar una 'roca' de malos pensamientos -No puedo, no soy capaz, queda mucho, quien me manda meterme en estas cosas...-
Es curioso como funcionan nuestras mentes, siempre digo (aunque luego vuelvo a caer) lo peligroso que resulta crearse una expectativa de lo que 'debería ser' porque luego las cosas no salen conforme a lo que esperas y no eres capaz de ver las cosas en perspectiva.
Seguimos avanzando y apenas restan un par de km para meta. Quedan por vencer las últimas dificultades en forma de exigentes cortafuegos y unas condiciones meteorológicas cada vez más duras, el viento arrecia, hay niebla y comienza a sentirse el frío.
Seguía encontrándome muy cansado y en cuanto la pendiente se elevaba automáticamente ya caminaba. Si esto fuera la pista la tentación sería tan grande que creo que echaría el pie fuera del tartán, pero aquí no queda más remedio que llegar hasta la cima aunque sea arrastrándose.
Un tramo embarrado en el último cortafuegos supone el penúltimo obstáculo. No queda mucho y ya se oye jaleo arriba.
...
Pero ¿quien podría estar en la cima dando gritos y armando barullo con una trompeta con el día que está?
¡Grande Panucci y los Vía XVIII!
-¡200 m para meta!
Un subidón de energía para afrontar el último repecho.
Pista buena, pendiente moderada... ¡pero como me costó!
El viento arreciaba en contra tanto que me parecía ir con la cabeza pegada al suelo. Creo que si me hubiera dejado caer hacia delante no habría caido. Se me hizo eterno.
Por fin el cielo, la visión de los jueces. Voy sin dorsal, me preguntan el nº y se lo digo. Bien por los jueces de la delegación ourensana, hay momentos de interpretar el reglamento y no de comportarse como un autómata como otros.
Finalmente puesto 83º, 1h19'55", algo más de 4' más respecto a mi participación de hace 2 años.
En frío pues a lo mejor no es tan mal resultado, alguien podría pensar ¿y éste de que se queja si ha entrado entre el primer tercio de participantes? Y sin embargo las carreras no se pueden juzgar por una aséptica mirada a una clasificación. En el Aviaman acabé entre los últimos y acabé contento, aquí no, hay muchos otros factores.
Había mandado una mochila para arriba para bajar a pie como hiciera las 2 últimas ediciones pero estaba demasiado cansado y los buses estan aparcados allí. Demasiado tentador.
¿Y ahora qué?
Pues por lo de pronto hoy descansar y quizás replantearse algunas cosas. No creo que haya sido únicamente un día malo porque el jueves también me encontré muy mal entrenando. Creo que hasta que no pase todo el rollo de mis exámenes, trabajo, proyecto y demás no voy salir de este bajón porque al final una cosa siempre influye en la otra.
Pero nada, paciencia, ya vendrán tiempos mejores, o eso espero.
Clasificaciones (completas aquí)
Masculina
1º Iván Docampo Gimnástica Pontevedra 58:09
2º Luis Calvo 59:10
3º Óscar Piñeiro C. Alejandro Gómez 1:00:19
Femenina
1ª Mª Rosario Figueroa 1:21:06
2ª Almudena Suárez 1:25:48
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