Rock you like a hurricane: XI Carreira de Nadal San Cibrao das Viñas

martes, 18 de diciembre de 2012

XI Carreira de Nadal San Cibrao das Viñas

Un clásico que siempre vuelve por Navidad. He corrido casi todas las ediciones de esta prueba y la verdad es que, mientras pueda, lo seguiré haciendo porque está muy bien.

En los últimos años nos había acompañado el frío pero este fue una carrera pasada por agua. Puestos a elegir, prefiero el frío, correr a -1º o -2º no me supone mucho problema pero la lluvia ya me resulta más molesta. Como era la primera competición de la temporada aún 'hace gracia' correr así pero 4 o 5 días seguidos como este y ya me dan ganas de mandar todo a la mierda.

Mismo recorrido del pasado año -no llega a 8,5 Km- con un perfil bastante entretenido. Buen ambiente y, a pesar del día y de la coincidencia con otras pruebas en el calendario, muy buena participación. Muchos amigos y gente conocida, corredores veteranos con muchos kilómetros y carreras encima, pero también debutantes y recién llegados al mundillo; lo que siempre es bueno.

Hice el calentamiento con unos compañeros pero se nos fue algo la pinza y por poco no llegamos a tiempo. Hicimos todo el 2º bucle de la carrera al revés (unos 5 km) y el último kilómetro nos llegamos a poner a 3'45" para poder presentarnos en la línea de salida. Suerte que era bajando.

No fue el calentamiento ideal para una competición, no dio tiempo ni a hacer unos progresivos pero mirándolo por el lado del entrenamiento estuvo bien, le sacamos más partido a la mañana.

No pillé buen sitio de inicio y empecé a correr desde bastante atrás. Así que , entre eso y la pasada de revoluciones del 'calentamiento', durante los primeros kilómetros no fui demasiado cómodo. Me costó encontrar mi sitio.

Supuestamente el km 1 lo pasé en 3'54" pero creo que tenía que estar mal situado, porque llevaba muchísima gente delante y la sensación no era, ni mucho menos, la de estar corriendo por debajo de 4'/Km.

La idea, al menos de inicio, era correr como en ediciones precedentes; un ritmo progresivo hasta poco más del km 5 (cuando se acabara de subir) y luego aprovechar la bajada para volar los 3 kilómetros restantes hasta meta.

Los parciales de los siguientes kilómetros seguían siendo demasiado buenos como para creérselos. Pensaba que si en verdad corriera a 3'47" no iría tan retrasado, así que ya sospechaba que hacia el final habría algún kilómetro muy largo.

Fiándome de las sensaciones me notaba un tanto atrancado pero, al mismo tiempo, me parecía que iba a más conforme transcurría la carrera.

Una vez coronada, sin demasiados problemas, la pequeña 'cota de montaña' que nos reservaba el recorrido, tocaba poner en práctica la idea inicial.

Sin embargo, ya fuera por la lluvia o por lo que fuera, las sensaciones no eran demasiado buenas. Me sentía con fuerzas pero al mismo tiempo tenía dudas sobre si podría aguantar un incremento del ritmo hasta meta.

Al final, las carreras también tiene su componente mental, y no es algo de poca importancia. Últimamente noto que me falta algo de convicción, entrenando y compitiendo. Llevo 6 semanas entrenando bien pero falla ese puntillo extra que te da creérselo y saber aguantar un poquito el sufrimiento. Me doy cuenta también escalando en el rocódromo.

Al final, en esta ocasión, pude acallar la vocecita que decía que no iba llegar y si, me decidí a tirar.

3'27, 3'32", 3'32"?? No me creo esos parciales pero sí que me noté rápido. Tampoco el de los últimos 500 m en 3'11", quizás ahí estuviera la clave de los kilómetros 'cortos'

Recta de meta y fin del concurso de camisetas mojadas.

34'07" de tiempo oficial, puesto 92º. Mal tiempo si lo comparamos con otras ediciones pero el 33'49" del tiempo neto lo maquilla y las condiciones fueron bastante complicadas. Afortunadamente no hizo ni frío ni viento.

Contento porque al final cruzar una línea de meta, sea la que sea, siempre supone un motivo de satisfacción.

Una de las cosas buenas de esta carrera está en lo que no es carrera. Quiero decir, en detalles como las empanadas y bocatas, los sorteos y cosas así. Pequeños detalles que al final hace que se distinga de otras y apetezca volver.

Amador: el alma de la fiesta.

Con lo desapacible del día y todo fuimos muchos los que nos quedamos a ver la entrega de premios y a ver si nos tocaba algo en el sorteo. Y mira por donde esta vez tuve suerte: una camiseta polar XS (jo, que fino estoy que me sirve) y 3 pares de calcetines cortesía de la tienda Running Sport (los que seáis de Ourense os las recomiendo, Nª Sra. de la Sanínza 18, la lleva Diego Ribao, un chaval gran corredor de montaña)

No me puedo quejar ¿eh? esta vez me gané el día :-)