miércoles, 28 de mayo de 2014

VII Carreira popular Río Mao - Bóveda

Este domingo no había mucho donde elegir, supongo que por el tema de las elecciones europeas. Por mi parte buscaba alguna competición para afinar un poco de cara al mundial de duatlón de Pontevedra, así que una carrera corta y rápida no me venía nada mal. La de Bóveda era buena candidata, ya era conocida, participara hará un par de años y no estuviera mal, buen ambiente y buen trato, muy familiar.

Así que hasta allí me fui. Como no queda demasiado lejos de Ourense me encontré con muchas caras conocidas, amigos y algún compañero de equipo. 


Sobre la carrera en sí no hay mucho que contar, fue un guión que no se apartó demasiado de lo esperado. Salí relativamente bien colocado, los primeros metros eran bastante estrechos pero no perdí demasiado tiempo, bastante fluido todo. Luego además vendría un terreno muy favorable, en ligera pendiente a favor, que se prestaba a dar zapatilla. Aquí la gente volaba. O volábamos. El paso del primer kilómetro fue rapidísimo, yo lo hice en 3'40" pero iba bastante gente por delante.
Luego ya habría quien lo pagaría, así que que a base de mantener el ritmo (hice una carrera muy regular, el peor parcial 3'51" el último Km que picaba hacia arriba, el mejor este primero, luego tres kilómetros clavados a 3'43") pude ganar unos cuantos puestos y, a medida que transcurría la carrera, situarme entre los 25 primeros.
En general me lo tomé como test para el duatlón y me encontré bien. Si consigo correr a ese ritmo en Pontevedra me daré por satisfecho. La bici será otra historia, sobrevivir y poco más. Aunque los últimos puestos me estén reservados de igual manera, se trata de hacer un papel digno dentro de mis posibilidades.
Pero siguiendo con la narración, hasta el kilómetro 3 fui guiándome por la referencia de mi compañero Fon que marchaba unos metros por delante. Como sé como anda fue de gran ayuda. Al fin logré darle alcance, me puse a la par, y así fuimos los dos Aurum marchando a buen ritmo y ganando posiciones.
A falta de un par de kilómetros descolgué a Fon y di alcance al grupo en el que iba Pablo Feijoo. Me seguía encontrando bien y me fui para adelante.
Sin embargo ya casi en el último kilómetro noté molestias en el gemelo de mi pierna izquierda así como mucha tensión en la musculatura isquiotibial así que por precaución bajé el ritmo. Al final pareció quedarse en nada y en los últimos metros volví acelerar aunque luego en frío acabé cojeando.
Así pues me quedó un sabor agridulce, por un lado satisfecho con la carrera: 23º de la clasificación general, 27'48" para los 7,5 Km escasos (más bien 7,4) a un ritmo de 3'43"/Km, con mucha fuerza, buenas sensaciones y bajando en casi un minuto y medio mi anterior registro en la prueba; pero por otra algo preocupado por las molestias y tener una competición importante a 7 días vista.
Afortunadamente a lo largo de esta semana parece que ha ido a mejor. Espero que no me de la lata.


No hay mucho más que destacar. Creo que por mi parte he cumplido con el plan que me propuse cuando decidí inscribirme en Pontevedra, en bici con el invierno en blanco poco pude hacer, ya no es mi fuerte ni estoy en el mejor momento pero tampoco en el peor, la última salida en carretera me salió una media muy respetable y corriendo estoy bien para lo que soy yo y mi nivel. Me da pena no ir al gallego de veteranos en pista pero no se puede estar en varios sitios a la vez. Espero disfrutar de la experiencia del mundial como lo hice la vez que participé en el europeo de triatlón. A ver que tal.


Clasificaciones (completas aquí)
Masculina
1º Juan Antonio Guede  Montepenarrubia  24:15
2º Luis Iglesias  Atl. Arenteiro  24:35
3º Jorge Vázquez  Esprintes Ourense  25:21

Femenina
1ª Teresa Corral  Monte Segade 30:31
2ª Mª Ferreiro  30:33
3ª Sonia Vázquez  30:40

Fotos de Pablo Feijoo

viernes, 23 de mayo de 2014

Historias II


"...A los 15 minutos de acabar la prueba se hizo público el anuncio de que Brasher era descalificado por interrumpir al noruego. Pero en un acto de deportividad plena, Larsen reconoció que el golpe recibido no cambió el curso de los acontecimientos y que el resultado hubiera sido el mismo aunque no hubiera recibido ese golpe. El tercero, el húngaro Rozsnyoit y el cuarto Heinz Laufer también apoyaron al británico. El alemán llegó a amenazar con lanzar la medalla de bronce a los jueces si se la concedían. Brasher lograba su medalla pero estaba en completo estado de embriaguez cuando le comunicaron la noticia. Había intentado ahogar el disgusto en alcohol. Según sus propias palabras “Yo estaba borracho como una cuba, totalmente borracho, en el podio olímpico. Tengo una sonrisa estúpida en la cara y casi caigo de bruces cuando me inclino hacia delante, respirando vapores de ginebra en todo un miembro francés del COI que intentaba colgar una medalla alrededor del cuello”. Brasher, con el paso de los años, se convertiría en el fundador del maratón de Londres, posiblemente el más prestigioso del mundo en cuanto a calidad de sus participantes..."

"La apasionante vida de Franz Stampfl." Artículo de Óscar Fernández. En Atletismo español mayo/junio 2014


miércoles, 21 de mayo de 2014

I Carreira popular de Ribadavia

Pocas veces puedo ir a la salida de una carrera caminando y este año ya van dos. Esta fue una competición muy especial para mí, organizada por mi club y con una participación activa en el diseño del circuito. Hace algo más de un mes Lalo y yo estuvimos correteando por el pueblo decidiendo por donde metíamos a la gente, al final creo que ha quedado una cosa bonita, a mí por lo menos me encantó aunque no soy objetivo.


Organizar algo, aunque sea una carrera pequeña como esta siempre es complicado. Los corredores solemos llegar, recoger el dorsal, correr, recoger lo que te dan y marchar para casa. Cómo nos dan todo hecho no solemos valorar lo que hay detrás por eso siempre digo que todo corredor debería ser voluntario en una carrera al menos una vez.
Bueno la verdad es que para ser la primera edición fue todo bastante bien, la participación fue bastante aceptable pese coincidir en el fin de semana con muchísimas otras pruebas, hubo buen ambiente, algo de calor de más y algún susto como la chica que se desmayó entre el público pero en general bien. Haciendo autocrítica también hubo algún fallo en la organización, la plaza habría que balizarla mejor para que no se cruzara gente, el avituallamiento intermedio estaría mejor un par de km antes ya que hacía mucho calor y habría que mejorar el agua del final. En mi opinión quizás habría que dar la bolsa al final de la carrera y así cada uno se llevaba ya su botella de agua y powerade o lo que fuera y nos evitamos tanto problemas de "rapiña" como que alguien se quede sin ella.
Pero bueno, ya en lo personal y con respecto a la carrera se  puede resumir en una palabra: FLIPÉ.




Salida desde la Plaza Mayor, 12 de la mañana. Como no había grandes galgos salvo Javi Paredes, muy superior al resto, me pude dar el lujo de salir desde la primera fila. Ya que estoy en mi casa un día es un día :-)


Suena el disparo y salimos. Doblamos la primera curva y sorprendentemente voy en cabeza junto a mi compi Roberto.
La sorpresa no se acaba ahí si no que pasan los metros y sigo en cabeza. Yo flipando. El primer kilómetro era rapidísimo, cuesta abajo. Ya el día que estuvimos diseñando el recorrido sin quererlo ese kilómetro nos salió por debajo de 4'. Pero esta vez en cabeza, con las alas que da correr en casa, según me dijeron (ya que yo no tengo GPS ni nada) íbamos a 3'20". De todas formas tampoco era un ritmo de locura, iba cómodo, sucedió sin pretenderlo.
Tomamos el cruce de la calle Ribeiro y sigo primero. ¡Joder! ¿que está pasando? miro hacia atrás a ver donde viene Javi y el resto y lo que veo es que hasta he abierto hueco. Esto es un sueño, que nadie me despierte.
¿Sabéis en el Tour de Francia o las grandes vueltas cuando a veces se da la oportunidad que la carrera pasa por el pueblo de algún ciclista y el resto del pelotón lo deja pasar en primer lugar? Pues más o menos sucedió lo mismo. Hasta el Km 1,5 más o menos fui liderando la prueba. Sólo puedo dar las gracias a quienes lo permitieron, sobre todo a Javi Paredes que está a otro nivel, pero también a mis compañeros de club los hermanos Espiña, a Miguel y alguno que otro más por ahí que sé de sobra que andan mejor que yo.
Al final ya sabía que las cosas tendrían que discurrir por su vía más lógica y ya en terreno llano un grupito de unos 8 corredores me adelanta. Yo me quedo unos metros atrás corriendo junto a José LuisTorres. Rodeamos el campo de fútbol y retornamos cara al pueblo por el carril bici. La cabeza no me saca más que unos metros y en principio aguanto bien aunque habría que reservar fuerzas para el final que era la parte más complicada.
Cuando estaba a punto de tomar el paseo del río ocurre la cagada del día, se me desata la zapatilla. No sé que me pasa este año, ya me sucedió en la Vig-Bay y ahora, y eso que le hago doble nudo y entrenando no recuerdo que me haya pasado. Pero siempre tiene que suceder en el momento más inoportuno. Me paro a atarlas, no sé cuanto tiempo pierdo pero me pasan 5 o 6 corredores. Una pena.
Me reengancho a la carrera justo detrás de Javier Ortega y Atanes que me sirven para volver  a coger el ritmo. Ahora ya no vale de nada lamentarse por el tiempo perdido.
Me sigo sintiendo bien y me quedo junto a Atanes. Ortega se retrasa unos metros. Hace mucho calor, en el paseo del río a ratos hay sombra y se lleva mejor, pero a cambio también hay bastante polvo en suspensión. Esta semana han estado adecuando un poco la pista y rellenando los baches para la carrera y como no ha llovido se nota.
De todas formas voy bastante bien, gestionando con cabeza las fuerzas ante la subida que se avecinaría en el Km 6,5. El conocerla bien es una ventaja. Hasta esos momentos marcharía en el puesto 16 o 17º de la carrera pero ya en la subida lograría distanciarme de Atanes.
Una vez arriba estaba el avituallamiento pero apenas bebí, sólo me eché agua por encima y remojé la boca. Sentía el calor pero lo llevaba bien. No me suelen beneficiar estas condiciones pero esta vez ni sed tenía.
El kilómetro siguiente por carretera no era de tanta pendiente como el anterior pero para mí fue el más duro por el efecto de ver largas rectas interminables. Aquí ya me tocó apretar los dientes de verdad.
La carrera se aproximaba al final. A ver si no me arrepentía de mi diseño del callejeo por el casco histórico. 
Modestia aparte, este final me parece superchulo :-) Algo durillo pero se lleva bien creo. Calles estrechas y empedradas. A mí hasta se hizo corto.
Al final entro en meta en la Plaza Mayor: 33'57", puesto 14º. No había mucho nivel pero esa calsificación entre más de 180 llegados no está nada mal. Me queda la pena de lo de la zapatilla ya que casi tuve el top10 al alcance de la mano. 24" me separaron de 10º (mi compi de tri Gonzalo que en condiciones normales me da 1000 vueltas pero tras hacer 2 horas de bici la cosa se igualaba un poco más) No sé cuanto tiempo perdería atándome pero yo creo que estaría ahí o casi.
De todas formas contentísimo claro. Más aún cuando me enteré de que Roberto había sido 3º ¡Que grande!
La experiencia fantástica y lo de ir liderando la prueba al principio un puntazo.No creo que me vuelva ver en otra.
La carrera espero de verdad que se consolide en el calendario porque tiene mucho potencial. Hay unas cuantas cosillas de mejorar pero puede convertirse en una de las mejores populares de la provincia.

Clasificaciones (completas aquí)
Masculina
1º Javier Paredes  Gimnástica Pontevedra  31:42
2º Jaime Noguerol  Atl. Arenteiro 32:26
3º Roberto Espiña  C.D. Aurum 32:30

Femenina
1ª Ariana González S.A. Tegra  36:21
2ª Silvia Rodríguez Ourenrunning 38:11
3ª Ángeles Rodríguez  Ourenrunning  40:11

Fotos: La Región

miércoles, 14 de mayo de 2014

I Triatlón Rías Baixas

Pues llegó el primer triatlón del año. Así, casi de golpe, con muy poquita base de entrenamientos específicos, en distancia olímpica además (me niego a llamarle corta) y sin drafting. A priori pintaza estupenda tanto por los circuitos como por la zona: natación en la playa de Silgar en pleno centro de Sanxenxo, bici a 2 vueltas por la carretera de la costa hasta la zona de la Lanzada y carrera a pie también a 2 vueltas entre Sanxenxo y Portonovo. Además era en modalidad sin drafting, para mí mucho más atractiva. Triatlón clásico del bueno.


El pero, que la salida era tempranísimo, a las 8 de la mañana, lo que obligaba a un madrugón y en mi caso hacía que lo más aconsejable fuese el ir el día anterior y dormir allí, más que nada porque es casi una hora y media de trayecto y no me gusta conducir de noche.
A estas alturas del año conseguir una habitación barata con la sobreabundancia de hoteles de la zona no fue muy complicado. Elegí parar en Montalvo, por donde pasaba el circuito de bici, a unos 10' en coche de la salida. La idea era llegar temprano el sábado pero por varios motivos se me hizo tarde y al final, entre recoger el dorsal y buscar el sitio, sólo me dio tiempo a disfrutar de una puesta de sol en la playa como ya visteis, y poco más. Me fui a la cama temprano que había que madrugar al día siguiente.
Algo muy de agradecer en este triatlón fue que habilitaran zona de aparcamiento para los participantes justo al lado de boxes. Así se facilitó mucho todo. Llegué temprano,  pasé control de material y a esperar.
El día anterior había estado bueno pero a la noche ya se había nublado y el día amanecía cubierto con alguna llovizna. No hacía demasiado frío pero la mañana no invitaba mucho a la actividad que digamos. Además a mí me faltaba mi café.
Tras ponerme el neopreno me fui probar el agua con mi compañero Jose Manuel. Lo cierto es que la esperaba más fría , hasta sobraba el gorrito de neopreno (bueno en realidad sobrar no sobraba pero tampoco hacía mucha falta)
La verdad es que a esas horas el cuerpo no me pedía demasiada actividad pero esperaba que con el sonido de la bocina de salida la cosa cambiara.


No empecé demasiado bien cuando ya en las primeras brazadas me empezó a entrar agua en las gafas. Ya me había entrado al calentar, pero las había recolocado y ajustado bien, y ahora volvía a entrar. No sé muy bien por donde porque creo que las gafas estaban bien puestas, no había recibido golpes ni se habían movido, era como si se colara entre el cristal y la goma. No sé..
El caso es que iba tan incómodo que me empecé a agobiar. No disfrutaba nada y hasta no daba respirado bien. Y eso que la natación fue de las mejores que recuerdo. Sin olas, muy limpia, con las boyas perfectamente visibles, bien orientado... para disfrutarla.


Tuve que hacer un esfuerzo para dominar la respiración, intentar soltar el aire dentro del agua y relajarme un poco.
Cuando doblé la primera boya me vi en medio de un tumulto de gente y hasta tuve que pasar por encima de un tío pero fuera de eso la natación siguió siendo muy limpia. De todas formas, el resto de las boyas ya no las pasé tan ceñidas.
Pese a que no veía muy bien por lo del agua en las gafas no tuve demasiados problemas de orientación.
Acabada la primera vuelta se salía a la playa para doblar unas banderas y volver a entrar. Aproveché para vaciar las gafas y volverlas ajustar. Pero ni con esas, en cuanto me puse a nadar en la segunda vuelta más de lo mismo, me seguía entrando agua y seguía nadando incómodo. Tocaba aguantarse.
El resto de la vuelta transcurrió sin más incidentes. Pie a tierra y se acabó la natación. Conforme me acerco a la rampa de salida de la playa veo que el crono ya marca 33', que horror. Ese tiempo no lo hago ni en la piscina nadando suave.
Al final tiempo del parcial 34'39" (241º) 
Ya empiezo con mal pie, no fue lo del Riveira el año pasado pero le llega bien.
Bueno, por lo menos, malo sería que a partir de ese momento no fuese ganando posiciones.
La transición era larguísima aunque tampoco creo que sea para criticarlo demasiado como he visto por ahí, las he  vivido más largas y no pasa nada.

Me cuesta un poco quitarme el neopreno debido a lo abultado del chip y hago practicamente una transición de un larga distancia (en el Desafío Cíes la hice muchismo más rápido), me pongo calcetines y hasta maillot, que total no me juego nada. El maillot igual no hacía tampoco mucha falta porque no hacía tanto frío pero yo me notaba destemplado y el sol no iba asomar. Tampoco me sobró.
Tras casi 4' de transición (3'40") y ya empiezo a pedalear.
En lo primeros compases adelanto ya a alguna gente pero no me encuentro cómodo. Ni encuentro el desarrollo adecuado, ni la postura ni nada. En toda la bici apenas fui acoplado, siempre cambiando de desarrollo, muchos ratos de pie... culo de mal asiento.
El circuito, que en principio parecía llano, resultó ser bastante sinuoso, sin grandes rampas pero con mucho sube-baja. Difícil encontrar un ritmo.
En las partes que picaban hacia arriba iba bastante bien y ganaba puestos pero cuando tocaba cuesta abajo la bici no iba. Hasta pensé que estaría frenado pero no fue así. No sé si era la sensación o realmente pasaba algo pero no era capaz de pillar velocidad. Con todo el desarrollo metido (uso compact), cuesta abajo y pedaleando a tope no llegaba a los 50 Km/h. Y claro, los que antes adelantara ahora me volvían pasar como motos.
De todas formas intentaba disfrutar del recorrido. Cuantos recuerdos me trae esta carretera, de crío pasaba parte del verano aquí, la de veces que iba por esta carretera a la playa... aunque ahora está todo bastante cambiado.
El que sigue estando en su sitio es el 'cormorán de la Lanzada', o el pájaro como lo llamaba yo. De pequeño pensaba que era disecado pero en realidad es una escultura del mismo autor, por cierto, que el de la playa de Silgar donde nadamos.
Con estos "pájaros" en la cabeza llego al punto de retorno. En esos momentos lloviznaba y las gafas de sol se hacían incómodas pero no había traído otras. Como ya había visto alguna tiradas en la carretera decidí no quitármelas.
En general durante todo el recorrido no vi mucho drafting ni grupos, los jueces sacaron alguna tarjeta y  aunque vi alguno que otro bordeando la legalidad nada tan descarado como en el Desafío Cíes. Lo que ya no respetó tanta gente es otra regla, igual no tan conocida pero igualmente importante para el buen desarrollo de las pruebas. 5.5 b (iv) del reglamento de competiciones: "Los atletas deben mantenerse a un lado del recorrido y no provocar una incidencia de bloqueo a los atletas que vienen por detrás. El bloqueo se produce cuando un atleta que viene por detrás no puede adelantar porque el atleta que le precede está mal situado"
A alguno tuve que sufrir circulando todo el rato por el lado izquierdo del carril, en fin...
Segunda vuelta de bici. Lo único bueno es que me acordaba de comer algo y los kilómetros no me pesaban. De nuevo, cuando el terreno picaba hacia arriba, era cuando mejor me encontraba. El resto del tiempo incómodo. Hacia abajo con todo el desarrollo metido noté cómo me saltaba el cambio y de ahí en adelante ya no utilicé la corona más pequeña por miedo a que se me saliera la cadena y me pasara como en Noia. Si ya no bajaba bien pues ahora aún peor.
De todas formas,  salvo por una señora que cruzó la carretera con un carrito y casi me la llevo por delante (se llevó un buen grito de mi parte, aún tengo demasiado reciente lo del perro) fui completando el recorrido sin incidencias y llegué a boxes con 1h26'19" de parcial oficial (234º), El real de lo que es la bici  fue 1h22'29" a 29 Km/h de media. Bastante pobre. Más sorprendente aún que la máxima fuera de 49,9.  Ya decía yo que no andaba cuesta abajo.

Quedaba tan solo el último el último sector que es también el único que puedo hacer algo más o menos decente  :-)
La segunda transición no fue mala pero con esto de quitarse el maillot ya perdí unos segundillos. Luego fue empezar a dar zapatilla y ya me cambiaron totalmente las sensaciones que estaba teniendo hasta ese momento. Me encontré comodísimo desde el primer metro, adelantando gente y corriendo muy fácil. Vaya que en vez de estar corriendo un triatlón me parecía estar corriendo una carrera popular con un largo calentamiento previo.


Poco que destacar en esta parte por lo cómoda que me resultó, más o menos puede mantener el ritmo hasta el final. En la segunda vuelta creo que aflojé un poco, debido también a que cada vez resultaba más complicado ganar posiciones  y ya no me motivaba, aunque en el último kilómetro un mano a mano con un triatleta del Pontevedra me dio vidilla.
Al final buen parcial aunque pensaba que habría sido mejor, 41'58" (83º)  no está mal pero tampoco es nada del otro mundo, acabé muy  entero eso sí.


En total 2h42'58" puesto 205º. Comparar tiempos en triatlones diferentes es una tontería porque ninguno es igual pero puedo decir que no ha sido mi mejor actuación en la distancia aunque tampoco fue el desastre de Riveira el año pasado. Digamos que para ser el primero del año, acudir con poca base de entrenamientos específicos y eso no ha estado mal. Por momentos lo he pasado mal pero me queda buen sabor de boca, la experiencia creo que ha merecido la pena y la prueba está muy bien. Para el año si puedo repito.

Clasificaciones (completas aquí)
Masculina
1º Jose Manuel Pardo Muralla Lugo  2:05:44
2º Lucas Escaneo C.T, Morrazo  2:05:45
3º Miguel Figueira C.T. Morrazo 2:07:13

Femenina
1ª Mar Villar  C.T. Morrazo 2:32:49
2ª Marta Barbeito A.D. Fogar  2:34:42
3ª Paloma Herbello Arcade Inforhouse  2:45:10

Fotos: Jorge

Inciso publicitario :-P
Cómo sé que por aquí entra mucho amante de la natación en estos momentos hay un concurso de fotos en el facebook de Capra pyrenaica. Si queréis llevaros una camiseta como las de la imagen o simplemente a pasar un rato divertido animaros a subir vuestras mejores fotos natatorias.



domingo, 11 de mayo de 2014

Una pausa


De vez en cuando hay que hacer
una pausa

contemplarse a sí mismo
sin la fruición cotidiana

examinar el pasado
rubro por rubro
etapa por etapa
baldosa por baldosa

y no llorarse las mentiras
sino cantarse las verdades.

Mario Benedetti








Viernes 9, tarde previa al I Triatlón Rias Baixas, cto gallego distancia corta (olímpica) Montalvo. Playa desierta, silencio, sonido de las olas, puesta de sol... 
De vez en cuando hay que hacer una pausa / contemplarse a sí mismo... 

A veces una competición es la excusa perfecta para esos pequeños momentos que no tienen precio. La crónica de la carrera para más adelante. El resultado era lo de menos.

martes, 6 de mayo de 2014

I Duatlón popular de Tomiño

Tras una buena temporada más centrado en el atletismo tocaba volver al mundo del multideporte. Ahora con muchas ganas y nuevos retos por delante. Este año apenas había tocado la bici hasta prácticamente el mes de Abril pero poquito a poco fui recuperando sensaciones. No digo nivel, porque nivel en bici nunca he tenido ni la he entrenado nunca en serio, pero sí para poder disfrutar de estas modalidades deportivas.
La competición elegida para el retorno fue el I duatón de Tomiño, una prueba popular en distancia sprint pero con una bici corta (17 Km) A priori mejor para mí.
Pese a todo estuve a punto de no poder acudir. Entrenando en bici de carretera el día 1 festivo tuve un encontronazo con un perro que me llevo a probar el asfalto. Lo que pueden cambiar las cosas en un instante. Gracias al dueño irresponsable que lo dejó suelto raspones en manos, codo, rodilla, un guante roto y lo peor un golpe en la cadera. Afortunadamente a la bici no le pasó nada (fue lo primero que miré... si, creo que estamos algo mal :-)) y continué entrenando durante 2 horas más aunque con los dolores no lo disfruté demasiado.
Ya por la tarde la cadera me hinchó bastante y la bursitis resultaba un poco incapacitante pero, gracias al hielo, a la mañana siguiente ya estaba bastante mejor y puede hacer algo de piscina.
No las tenía todas conmigo cuando me desplacé hasta Tomiño. La verdad es que aunque estaba bastante mejor aún me dolía si hacía el gesto de correr. Hasta tenía un sobre-muestra de un gel frío que nos dieron en la Vig-Bay y se lo eché.
De todas formas iba mirar a probar y que pasara lo que fuera. Si no podía correr me dedicaría a animar a los compañeros y a saludar a la gente del tri que algunos ya hacía bastante tiempo que no veía.

Un grupo de ourensanos :-)

Tarde prácticamente veraniega en Tomiño, sol radiante y mucho calor. Me recordaba al duatlón de Porriño del año pasado. Estas condiciones no me van nada a priori pero bueno, este deporte es también adaptación.
Con este día no era necesario un calentamiento muy largo pero algo había que trotar. Molestias tenía pero trotar me permitía, veríamos luego si correr ya en serio.


Se da la salida, pronto el camino se estrecha y me quedo algo atascado pero hay tiempo de sobra. Hace demasiado calor y procuro reservar un poco. Las sensaciones son bastante buenas y el dolor llevadero salvo en el par de pequeños descensos que ofrece el circuito, ahí si que duele más al apoyar. de todas formas creo que el dolor me está haciendo correr más rápido, los apoyos son más vivos jaja



Este primer sector de 5 Km constaba de 2 vueltas de 2,5. Había salido bien hidratado y en la primera no tuve problema pero la segunda ya llevaba la boca seca. Suerte que había alguna sombra y luego en la bici podría beber.



Llegada a la transición junto a mi compañero de club Alberto, 18'19" parcial 48º. No sé si daba la distancia o no, Gustavo algo más de 15', supongo que si. De todas formas creo que está bien, además llegué con la sensación de haber guardado fuerzas.
La transición mala, lento y torpe. Nada nuevo aunque la de Carballiño fue peor. Habría que entrenarla y... comprarme unas zapatillas de triatlón.


Comienzo a pedalear, a mi ritmo. No me mato mucho a pillar grupo, primero intento hidratarme y luego recuperar sensaciones sobre las 2 ruedas. El recorrido constaba de 4 vueltas a un circuito demasiado corto (he leído que lo tuvieron que acortar por indicativo de tráfico aunque acertaron al dejar 4 vueltas y no meter una más) pero bastante entretenido.


Como ya había probado el asfalto esta semana me sentía algo inseguro. El punto de retorno era bastante peligroso porque estaba en un descenso que acababa bruscamente. En la primera vuelta casi nos lo comemos si no llega ser alguien que gritó a un compañero "quita el plato que ya viene el giro".


La cuesta la había visto antes al pasar con el coche, tenía cierta pendiente, no sabría decir pero también era corta. En mi caso lo de quitar el plato nada de nada. En bici no ando nada pero brutito también soy, el plato se queda. Subo unas cuantas coronas y lo asciendo de pie las 4 veces. 
Así van transcurriendo las vueltas. Me daban un poco de miedo los doblados (y los que me doblaban a mí) y las bicis de montaña, que ocupaban mucho y tampoco es que los carriles fueran muy anchos pero bueno bien. Conforme transcurría la prueba me iba encontrando mejor.


35'35" parcial 81º, 33'58" por el cuentakilómetros y media de 29,5 Km/h, no me voy a quejar, para lo entrenado aún le saco un buen rendimiento.
La segunda transición si que fue bastante buena. Además como ya había pasado lo peor me sentía más animado.




Sin embargo cuando empecé a correr si que tuve bastantes molestias en la cadera, debió de ser de la postura de la bici. Menos mal que sólo eran 2,5 Km.
Como ocurrió antes creo que el dolor me hizo correr más rápido. Me sentí con muchas fuerzas, iba adelantando gente fácilmente. 


Al último que llegué a cazar fue a mi buen amigo Miguel.


Momento cabrón





Así entre risas le robé la cartera al entrar a meta.
Muy contento con este último parcial 9'23" (29º) 
Al final 1h03'17" puesto 60º que no está mal.
Creo que todavía puedo mejorar un poco de cara al mundial de Pontevedra, al menos para no desentonar demasiado, porque visto el panorama está claro que voy tener que pelear por los últimos puestos pero con eso ya cuento y el mundial me motiva. La vida es demasiado corta para no hacer lo que hace feliz.

Clasificaciones (completas aquí)
Masculina
1º Gustavo Rodríguez  Cidade de Lugo Fluvial  51'45"
2º Nico Domínguez 53'16"
3º Brais Misa Atl. Porriño 53'21"

Femenina
1ª Aida Valiño Cidade de Lugo Fluvial  57'14"
2ª Marina González A.D Tri-Penta 1h02'27"
3ª María Martínez Atl. Porriño 1h04'42"

Fotos: organización, Ana María, Julia,

domingo, 4 de mayo de 2014

Historias...

"En Castrelos, en el lugar donde ha forjado a sus corredores, apareció un día J.A.S. de la mano de A.P. y el hermano de C. P., Bernardo. Lo habían visto correr por la calle, donde se ejercitaba por su cuenta para participar en el Gran Premio de Navidad. Le dijeron que sería mejor que se pusiera en  manos de un entrenador. Y allí estaban. “Venía fumando”, recuerda  (...) “Para ser atleta no se puede fumar”, le indicó sin contemplaciones. “Rápidamente tiró el cigarro”. En aquel instante se inició entre ellos una amistad duradera, sólida. “No ha tenido otro entrenador. Para mí ha sido como un hijo”."




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