miércoles, 30 de mayo de 2012

Una pequeña historia


"Un día estaba en los pastos y me encontré un viejo periódico que hablaba sobre la rivalidad de Coppi y Bartali. Me llegó como un rayo. Inmediatamente decidí que me convertiría en un campeón. Fuí hacia el valle y me compré una bicicleta. Pero me engañaron, porque me vendieron un perno viejo y pesado, eso lo descubrí despues. Mientras tanto empecé a entrenar solo, pero no sabía mucho de eso. Mi preparación básica era cargar sobre los hombros una cesta llena de ladrillos del trabajo, y luego subir con el perno de Chatillon hasta donde termina la carretera.
Cuando me llamaron al servicio militar me tocaron los alpinos. Fuí enviado a Courmayeur, la sede del Grupo Deportivo, pero no como deportista, sino como un soldado raso más. Un día recibí la orden de cortar el césped de la casa del general. Así que le dije a mi sargento furriel: ”Si me permite ir a casa y traer mi guadaña de segar el heno, le haré un trabajo que dejará al general muy contento.”
“¿Y cómo te vas a casa, si no tienes coche?” 
“En bici, mi sargento”
“Y ¿cuántos días te llevará ir desde aquí y volverte de nuevo a pedales?”
“Mire señor, si me deja ir ahora, estoy de regreso esta noche.”
El sargento se rió y me dejó ir. Cuando me vio ya en la tarde, con la guadaña al hombro y dos botellas de vino para él en la mochila, se quedó pasmado.
Me dijo: “Alpino Brunod, eres un talento natural. En diez días se celebra una carrera ciclista reservada a la  élite, y quiero que te inscribas en ella para representarnos con tu bicicleta”
El día de la carrera me presenté con el perno bajo la pancarta de salida. La gente se echó a reír. Los demás lucían hermosas bicicletas y musculosas piernas depiladas. Tenía miedo, pero el sargento me  hizo un guiño de aliento. Al comienzo,  de la pura emoción me tropecé y caí. Los otros desaparecieron tras la primera curva. Entonces me sentí poseído por la rabia, tal vez porque yo era pobre, o tal vez porque me sentía burlado, salté sobre los restos del pelotón, arrastré al grupo y demarré en la primera ascensión. Había ganado con más de un minuto sobre el segundo.
Mi carrera deportiva comenzó ese día. Me convertí en un ciclista de verdad, con una bicicleta de verdad. Corrí en equipo con Claudio Chiappucci, con quien compartí habitación. Luego el médico me envió a un equipo en Lombardía, donde vi algunas cosas que no me gustaron mucho y dejé de montar en bicicleta. Me fui a casa y estuve callado unos años. Así que empecé a correr en las montañas. Las ascensiones siempre me han gustado, quizás porque se asemejan un poco a mi vida."

El que pronunciaba estas palabras era Bruno Brunod, leyenda del skyrunning varias veces campeón del mundo (96-98) ahora de nuevo de actualidad tras el anuncio del proyecto de Kilian Jornet  'Summits of my life'.


El proyecto y este tipo de retos la verdad no me llaman mucho la atención pero gracias a él he podido descubrir esta historia-anécdota que me parece sublime. El texto es algo más largo con algún detalle más de su infancia y resto de su vida, lo tenéis más completo en el gran blog carrerasdemontaña.com que a su vez lo ha recogido y traducido del libro de Pietro Trabucchi 'Ripensare lo sport'.

lunes, 28 de mayo de 2012

Copa Deputación y Carrera Río Mao de Bóveda

Este fin de semana ya volvimos a la normalidad (porque no participar en algo ya es algo 'anormal' en mí jeje) y hubo competición por partida doble. El sábado por la mañana regresaba a las pistas de atletismo para participar en la 9ª jornada de la XXIX Copa Deputación de Atletismo en pista. En esta ocasión la prueba escogida fueron los 800 m.
Con una abultada lista de inscritos -aunque luego muchos no se presentaran- se prometía una carrera animada. 
Por delante había una buena colección de galgos y por detrás estaríamos los hermanos Espiña, el incombustible Domingo, Tomás y yo haciendo nuestra propia carrera.
Las sensaciones calentando no fueron muy buenas y ya en carrera  las cosas no cambiaron demasiado.
Se salió muy rápido, como suele ser habitual en estas distancias y con gente de nivel. 
En la primera curva que tuve que hacer por la calle 2 me sitúo el penúltimo.
Intento regular en la contrarrecta y ya finalizando la primera vuelta supero a Roberto Espiña.
Sobre 1'11" mi paso del 400, la verdad es que no era tampoco muy malo pero...
En la segunda vueltas me sentí sin fuerzas. Javier Espiña me sacaba bastantes metros y no me veía capaz de alcanzarle. Faltó la chispa de otras veces y me parecía más que estaba en la última vuelta de un 1500 que de un 800.
Hice lo que pude y entré a meta en 10º lugar con 2'24.13", lejos de mi marca. No siempre se puede estar bien.
De todas formas todo va sumando y en la pista lo pasamos bien.

Vídeo de la prueba por Óscar

Clasificaciones (completas de toda la jornada aquí)
800 m.l. masculino
1º  Daniel González  ADAS  2:01.06
2º  Olaf Araújo  Coruña Comarca  2:01.70
3º Víctor FErnández  OAAP 2:01.71

Esa misma noche del sábado se celebraba en O Couto una nueva prueba del circuito Corendo por Ourense pero decidí no participar así que a la mañana siguiente me fui hasta la localidad de Bóveda (Lugo) para descubrir una nueva carrera popular. Era la 5ª edición de la Carrera Popular Río Mao pero nunca había participado en ella ni tenía referencias.

 Una pequeña delegación ourensana.

Prueba pequeña, modesta, en una localidad pequeña pero con todos los ingredientes necesarios y suficientes: cronometraje por chip, recorrido señalizado cada km, voluntarios en los cruces, avituallamiento más que suficiente y obsequio de recuerdo. Todo ello de forma gratuita que en los tiempos que corren difícil es de ver. Hay que apoyar a estas organizaciones.
Con respecto a la prueba en sí pequé un poco de exceso de confianza: -7,5 Km. ¡bah! fácil y corta, se hace en un suspiro...
Pues no, al final se me hizo larga y me resultó más dura de lo que parecía en un principio.
El recorrido era prácticamente llano, a una vuelta,  con muchos tramos de largas rectas. El tiempo acompañó con una Tª ideal para correr y cielo cubierto.
A las 12:15 se dio la salida a los 185 participantes de la prueba absoluta. No había atletas muy destacados pero si un buen ramillete de atletas de nivel medio. Salí desde posiciones bastante adelantadas y durante el 1º Km me pasaba todo el mundo. Como la mayoría eran desconocidos para mí ya empezaba a pensar que iba muy mal pero luego resulta que pasé por el 1º Km en 3'46".

 

 

El ritmo era algo excesivo y tuve que aflojar, los siguientes km ya fueron sobre 10" más lentos. Parece que me he olvidado de como se corren estas carreras.
En el Km 4 o 5 ya me pareció que se estaba haciendo muy largo. El tramo del 5 al 6 o estaba mal medido o me salió horrible en 4'08" aunque luego el siguiente me pareció muy corto. Pese a todo en estos últimos km remonté 3 o 4 puestos.


Al final 29'21", puesto 42º a un ritmo de 3'55" que para esta distancia es bastante pobre pero no había para más. 
En fin, que tampoco importa porque sólo se trataba de volver a coger el ritmo y a ver si el próximo día corro con algo más de cabeza jeje

Clasificaciones (completas aquí)
Masculina
1º Leonardo Rodríguez  C.A. Monumental Lugo  24:28
2º Jose Seoane  Celta Atl.  24:56
3º Javier Veiga  C.A. A. Narón 25:01

Femenina
1ª  Luisa González  30:12
2ª Teresa Corral  Coruña Comarca 31:23
3ª Sonia Vázquez  Furafollas  31:51

Fotos: Gely,

Justo despues de correr regresé sin perder tiempo para poder seguir la carrera de las Word Series de Tri que televisaban por Teledeporte (por un día que echan triatlón en la tele) El interés estaba en la disputa Iván-Josemi por la plaza olímpica. Ya sabéis que soy muy fan de Iván Raña. Al final no pudo ser, pero verlo entrar en meta de esa manera y saludar al público no hace más que acrecentar mi admiración por este gran deportista que enganchó al triatlón a toda una generación. Sin andarse con excusas: "...hay gente que me dice que he tenido mala suerte. Pero la suerte ha sido buena, por no acabar de romperme de todo el pie" . Que grande Iván.
Por otro lado pues me alegro también por Josemi porque la verdad es que lo ha peleado mucho y la final ve realizado su sueño. Un deportista que promete mucho, ojalá le salgan unos buenos JJ.OO. 

 Bonita imagen, el deporte como tiene que ser.

viernes, 25 de mayo de 2012

El Deporte (el de verdad)

Estos últimos días tras el Aviaman han sido bastante complicados con un montón de trabajo pendiente y con bastantes molestias. El martes de la semana pasada perdí prácticamente la voz y fue todo un desafío dar la charla de triatlón que tenía pendiente en un colegio (además resulta que el micrófono no funcionaba y el 'querido' Windows que tenían allí se colgaba y fallba más que una escopeta de feria) Ahora afortunadamente estoy bastante mejor aunque me queda algo de tos.
Con todo esto el fin de semana pasado decidí darme un respiro y no competir, no estaba en las mejores condiciones y realmente no me apetecía. Me queda la espinita del Desafío Solidario de San Mamede para el año. Perdí el dinero de la inscripción pero dado el fin de esta carrera (reunir fondos para reforestar la sierra arrasada por los incendios)  lo considero bien empleado. Este fin de semana intentaremos volver a la carga.
De todas formas el propósito de esta entrada no es otro que el de difundir este vídeo que conocí gracias a mi amigo Diego Viruel y las redes sociales. Digo, insisto y sé que me repito pero es en estas cosas donde yo encuentro la verdadera esencia del deporte. La competición es secundaria, siempre lo será, aunque me alegre de los éxitos de mis amigos o admire el talento de quienes parecen hacerlo todo fácil.
Hay campeones/as que no salen en los telediarios.


Mucha suerte para este proyecto y mucho ánimo para la gente que esté pasando por situaciones parecidas.

miércoles, 16 de mayo de 2012

Aviaman 2012


1. El tiempo

Dicen que el ser humano desde siempre ha querido controlar el tiempo. Para ello ha inventado relojes y calendarios, ha ideado sistemas de medida, lo ha relacionado con otras variables -la rotación de nuestro planeta, la traslación alrededor de nuestra estrella-. Ha dividido la vida en períodos de: décadas, años, meses, semanas, días, horas, minutos...
Pero todo ese complejo sistema a veces falla cuando uno se da cuenta que no todos los períodos de tiempo tienen el mismo valor. A veces semanas y meses de nuestra vida resultan bastante intrascendentes y se pueden resumir en pocas líneas mientras que otros instantes, quizás de apenas unos segundos, son tan ricos en emociones y experiencias que nunca los olvidamos.
De esta secuencia de imágenes podría escribir una crónica (tranquilos, no lo voy hacer, soy un escritor mediocre y no sabría trasmitirlo) aunque en esta ocasión sólo servirá para introducir la narración. Porque quizás esta carrera merece ser contada desde el final....














Faltan 3 minutos para la una y media de la tarde del domingo 13 de Mayo. Tras casi 6 horas de competición cruzo la línea de meta. No me siento demasiado cansado, ni tampoco podría decirse que alegre. No, no es esa la palabra, es otra cosa. Ha salido todo bien, estoy rodeado de amigos y simplemente me siento feliz.


2. La dificultad.

Retrocedamos ahora a las 22:30 del sábado 12 de Mayo. 
Por la mañana había estado en la última jornada de un congreso en Pontevedra. Por la tarde había ido a depositar mi bici y a dar una lamentable charla técnica (todo hay que reconocerlo). Ahora estaba preparando el resto de mi equipación para el día siguiente. Desde el día anterior había sentido molestias en la garganta que achacaba a la mala climatización del Pazo de congresos pero conforme llegaba la noche me iba encontrando peor. Las sensaciones no engañaban, flojera en las piernas, piel caliente...
El termómetro lo confirma: 37,6º.
La historia podría acabarse muy bien aquí pero como ya sabéis el final continuamos con la historia.
Un consejo recibido vía facebook resultó providencial:


No dormí tranquilo ni bien pero dormí algo y a las 5 de la mañana me tomé de nuevo la Tª: Me sentía muy cansado pero tenía 36º. Luz verde. Al menos había que tomar la salida.
Acabé de hacer la mochila que había dejado a medias la noche anterior y llevé el coche a Leiro para coger el autobús que nos ponía la organización.


3. No hay excusas.

Si esta competición me dejó satisfecho es porque, dada mi situación de partida, si quería terminar la prueba tenía que hacer las cosas muy bien y  las hice. Primero de nada he de decir que independientemente de mi estado físico la preparación con la que llegaba a esta prueba era, por decirlo de alguna forma, muy justita. No había entrenado específicamente ni estoy muy entrenado para este tipo de distancias así que aunque estuviera al 100% esa mañana no haría un resultado mucho mejor. Como mucho podría hacer 10' menos en la bici o la carrera a pie pero no mucho más así que no quiero que todo esto suene a excusa. Por otro lado decir que la responsabilidad de esto es exclusivamente mía, las salidas en bici de carretera este año las cuento con los dedos de una mano pero es que a todo no se puede estar y ahora mismo el atletismo de pista y cross me tira mucho. Cuestión de equilibrio.
Creo haber dicho más de una vez que se puede competir a muchos niveles y los que no vivimos de esto podemos darnos el lujo de no tener porqué dar siempre el máximo de nuestras posibilidades en todo lo que hacemos (antes de que alguien se me lance a la yugular que vuelva leer lo subrayado). Quiero decir que en nuestras vidas caben otras prioridades y se puede disfrutar de este deporte igualmente. A veces leo los planes de las revistas y alucino. Me parece estupendo aquellos que busquen sus límites y el máximo rendimiento pero no es el único camino.

4. La inspiración

Varias fuentes de inspiración me ayudaron a acabar con éxito la prueba. Una de ellas fue una frase que escuché en el congreso en una de las conferencias impartida por Joaquín Dosil sobre Coaching deportivo "transformar los obstáculos en retos". Otra la filosofía jaramuguil y el ejemplo de Atalanta. Abel tiene un impresionante historial de maratones y pruebas de larga distancia muchas de ellas conseguidas con muy poquito entrenamiento pero con mucho conocimiento sobre cómo funciona su cuerpo. Corredor, triatleta, montañero, humanista, melómano y poeta. A base de leerle me ha ido contagiando su espíritu.

5. La salida.

Llegamos pues al domingo 13. Son las 7:20 de la mañana. El cielo está nublado, la luz es tenue como corresponde a los minutos posteriores al amanecer. Quedan 10 minutos para echarnos al agua.
Termino mi calentamiento en seco con una goma (parezco pro jeje pero es muy bueno) y me mentalizo para lo que va ser un día muy largo.
7:29 a.m. Miguel el speaker inicia la cuenta atrás...
La salida, inicialmente prevista en el agua, se da sobre la rampa...
¡Al agua!
 En las primeras brazadas la noto muy fría. Se me hace incómodo. Trato de adquirir un ritmo y no gastar muchas energías.




El recorrido consta de 2 vueltas a un triángulo de algo menos de 1000 m con salida del agua entre cada una de ellas.
La primera vuelta no va mal, cuando salgo del agua escucho la referencia de 18' que está dentro de lo aguardado.



Me vuelvo a lanzar al agua y la segunda vuelta la hago peor. En un circuito sencillísimo de nadar hago una de las mías y no consigo ir recto.




En 37'40" estoy fuera del agua, parcial 58º. El trámite está cumplido.



6. La transición.



Podría resumirse en la frase de Marta: "Furi, ¿quieres que te traiga un café?"

 

Lento no, lo siguiente. Pero había muchas cosas que hacer, ponerse bien los calcetines con los pies mojados no es fácil. Tampoco sacar el neopreno despues de tanto tiempo sin usarlo (además no lo llevé bien ajustado durante la natación)


Casco, gafas, zapatillas... Ya está todo. Podemos salir ahí fuera... Son las 8:10.

 


7. La bici.



75 km, 1700 m de desnivel positivo, y 4 puertos por delante. Un bonito paseo.


Cometí un error en este tri, el único grave, y fue el no abrigarse algo más para la bici. Las previsiones eran de Tª en aumento a lo largo de la mañana y sabía que en Coto Xarotos cuando calienta el sol pega bien. Sin embargo tuvimos nubes y nieblas en todo el sector de ciclismo y no fue hasta el final de la carrera a pie cuando el cielo azul hizo acto de presencia. Pasé frío.
Desde el principio noté que las piernas no iban a responder como en otras ocasiones. El tramo de salida de Castrelo lo tengo hecho muchas veces y puedo comparar sensaciones y velocidades.
Una cosa que hice bien fue readaptarme a la nueva situación. En vez de desesperarme porque me costara pasar de los 30 Km/h en llano mantuve la cabeza fría: comer, beber, regular.
En el tramo hasta Leiro me pasó bastante gente pero yo seguía con la idea de gastar poca energía.
8:45 a.m. Llega el puerto de Pena Corneira y enseguida meto todo el desarrollo.  El día que hicimos el recorrido entrenando aún podía subir con cierta agilidad, sin embargo hoy me costaba mucho. En el tramo duro pensé que si esto ya me costaba no iba ser capaz de subir Xarotos.



La llegada de Pirri y Bea en la moto me dio ánimos e hizo que se interrumpieran mis malos pensamientos.





Coronado Pena Corneira disfruté del descenso en solitario pese al frío, una delicia trazar esas curvas.
Se acabó muy pronto y luego tocó volver a subir.


Continué mi ritmo de supervivencia subiendo el puerto de Avión. Poco a poco se acercaba el momento decisivo - Si me encuentro muy mal lo dejo en la cima.-
Corono el 2º de los puertos y desciendo rumbo Abelenda. Es la hora de la verdad. Comer, beber, y echarle valor.

 

Camino Xarotos coincidí con otros triatletas que venían de Madrid y me dieron conversación por lo que se me hizo más ameno. Luego en el tramo duro se me fueron.
Tenía miedo a si sería capaz de superar la rampa infernal pero al final fue todo bien. Muy despacito pero no hubo problemas. Pese a sentirme flojo, muy flojo, la referencia de Lorena me sirvió de ayuda.


Subíamos por las curvas de herradura entre la niebla, esto ya se parecía a las etapas de los Lagos de Covadonga. La pena es que no dejaran ver el paisaje.
No tengo memorizadas cuantas curvas de herradura son así que a cada subida de nivel guardaba la esperanza de que fuera la última. Pero siempre había una más...
¡Por fin en la cima!
Pasan algunos minutos de las 10 de la mañana. Celebro la minivictoria pero no bajo la guardia ya que el terreno que queda es complicado aunque la escena lo compensa. Por encima de un mar de nubes, bajo la mirada de caballos salvajes y potrillos, te sientes protagonista de algo especial.
La bajada fue complicada y tuvo su momento de pánico cuando la niebla empañó totalmente mis gafas. Con las manos ocupadas accionando sendas manetas de freno hubo un momento que perdí totalmente la visión de la pista. Clavé los frenos mientras intentaba buscar un hueco en las gafas para poder ver.
Al final superamos la dificultad y proseguimos el descenso, ya con visión pero también con mucho frío.
Por último, en la subida a Pena Corneira por su lado suave, me encontré algo mejor que el año pasado y no me pilló la pájara.
En general quedé muy satisfecho con mi estrategia nutricional. Si hubiera sido así en Sanabria hace unos años me hubiera salido una carrera muy buena porque de aquella si que iba bien preparado. Hoy no me sentí vacío ni encharcado en ningún momento.
11:15 a.m. Encaro los últimos 10 km de descenso vertiginoso hasta Leiro y a pensar ya en la carrera.

 

Parcial oficial 3h39'11" (67º -penúltimo-) Parcial real 3h35'24", media de 21 Km/h, máxima de 61.

8. La carrera

Dejo la bici pensando que todavía hay que correr 20 km. 2 'sanmartiños' como dijo Pepe.
No me encontraba exhausto pero tampoco sabía si la gasolina me llegaría para las 4 vueltas.



En la primera coincidí con Jose Manuel Vázquez que estaba en su 2ª y se me hizo más llevadera. Aún así el ritmo era muy bajo.
Me lo tomé con la mentalidad de una carrera de montaña. Pensando sólo en llegar de un avituallamiento a otro y parándome a beber con calma.

 
 
El resto del tiempo pude ir corriendo y no tuve necesidad de caminar lo que siempre deja un mejor sabor de boca.

 

La vuelta más rápida fue la primera, luego fui decayendo aunque también perdí tiempo tomando los geles (me resultaban difíciles de abrir), hablando o dejando que me hicieran fotos.

  

Como el año pasado  cada vez que pasaba por la línea de meta recibía los ánimos de todos los compañeros. Me dijeron que sólo me faltó firmar autógrafos. Cada 25' coleccionaba una pulsera.




 

 

 

Así tras 1h40'49" completo el recorrido, parcial 52º.
Levanto los brazos y cruzo la línea de meta.
Faltan 3 minutos para la una y media de la tarde del domingo 13 de Mayo.

Clasificaciones (completas aquí)
Masculina
1º Gustavo Rodríguez Fluvial Lugo  4:12:02
2º Iván Cáceres  Diablillos Rivas  4:15:38
3º Diego Álvarez  Muralla Lugo  4:17:50

Femenina
1ª Aida Valiño  Fluvial Lugo  4:53:18
2ª Lucía Pérez  Diablillos Rivas  5:17:47
3ª Silvia Veira  A.D. Fogar  5:30:47

Fotos: Bea Viteri. Óscar, Julio, Patricia, Rubén,

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