martes, 24 de septiembre de 2013

Fin de temporada

Teóricamente con el Desafío Islas Cíes terminaba mi temporada. A partir de ahí lo planificado era una semana de descanso total para despejar un poco la cabeza y luego comenzar de nuevo poco a poco, que estar parado mucho tiempo es malo jeje.
Lo que pasa es que, bueno, organizaban el sábado un duatlón popular en Porriño y me apeteció ir. No me queda muy lejos y además en Porriño siempre organizan muy bien todo. Así que, digamos que hice un paréntesis en mi descanso. Vale, si, estoy enfermo jaja
Por supuesto el único objetivo era participar y pasar una tarde divertida. Ni estaba recuperado del todo del medio ironman ni estoy acostumbrado, en estos momentos, a unos ritmos de salida tan fuertes. 
De todas formas era de esperar que un duatlón sprint fuese un esfuerzo pequeño, 5 Km, luego 20 y acabar corriendo 2,5 luego se pasa ¿no?
¡Error!
Que duro se hizo. Recordadme que no vuelva correr duatlones en verano jaja
5 de la tarde, más de 30º y circuito con poquitas sombras. Antes de salir ya estaba cocido pero cuando mi compi quiso coger una botella de agua de un avituallamiento antes de salir no le dejaron. Y yo que iba hacer lo mismo...  nada, a aguantarse. Nos decían que si no luego no llegarían las botellas, mala señal.
Salir con sed ya es malo, pero al empezar a correr la cosa fue a peor.



Me lo tomé con calma. Si no ya digo que no llego. Y aún así trabajo costó.
2 vueltas de 2,5 km sin avituallamiento intermedio. El infierno en la tierra, ¡que horror!
Mal tiempo pero sobreviviendo. 20'57" (102º) No hace mucho no me costaba nada correr por debajo de los 4'/Km pero ahora se ve que ya no es así.



Transición muy animada con mucho público. Pillo la bici y tocan 20 km llanitos aunque con el asfalto algo roto.
La transición mala, mala... salí de boxes con un grupo y se me fueron todos al montar, por torpe.







Así pues, unos primeros metros en tierra de nadie, aliviado por beber pero sin conseguir ya desterrar la sed de mi boca. En este circuito pillar grupo era bastante ventajoso así que decidí esperar a los que venían por detrás y unirme a ellos.
Sin embargo, llegado el momento, las piernas no respondieron. Era capaz de ir a ritmo pero no tenía cambio. Supongo que es algo normal dadas las circunstancias.
Pues nada, al final me tocó hacer solo toda la bici, viva el no draft!
Parcial discreto 42'57" (107º), real sobre la bici 41'26", media de 29,3 Km/h y máxima de 38,5. Curioso que sea capaz de hacer una media mayor en 86 Km que en 20. Sería el cansancio, o la deshidratación, o mezcla de ambas.


Aunque durante la bici me bebí todo el bidón que llevaba seguía teniendo sed. O más que sed,  peor, la boca sequísima, la garganta y la lengua como hinchadas. Nunca vi cosa igual.
Cuando salimos de los boxes y vi que daban aguas me pareció el cielo.



Creó que bebí de más porque la poco tiempo me notaba fatal y aún creí que vomitaba, pero bueno, aún arrastrándose 2,5 Km pasan enseguida. 
11'57" este parcial (84º) Se ve que hubo una debacle general.



En total 1h15'50", puesto 104º. Una actuación pobre pero tampoco había intención de hacer mucho más.
No me esperaba un día tan duro pero es que este calor de finales de verano no es normal. Mucho retirado, en torno a 20, algunos por pinchazo debido al estado del circuito, y también mucho descalificado. 
Mal la organización en el tema del agua. También se echó en falta la ausencia de guardarropa. En otro detalles bien, al nivel que nos tienen acostumbrados, se nota que quieren agradar y lo consiguen  pero lo del agua es importante. En vez de darte una copia en color del circuito un botellín de agua en la primera carrera a pie se agradecía más.

Clasificaciones (completas aquí)
Masculina
1º  Brais Misa Triatlomix Mbikes  58:47
2º  Luis Alberto Paredes Triatlon Morrazo  59:04
3º  Elpidio Gómez Beariz Triatlón  59:24

Femenina
1ª Almudena Vázquez  Mar de Vigo  1:10:30
2ª Sandra Moral 1:22:54
3ª Xiana Rendo  Dexter  1:30:12


Pues esto fue el breve paréntesis en una semana de descanso. Ahora ya he comenzado la nueva temporada, de momento con mucha calma, el objetivo es recuperar, volver al gimnasio, fortalecer y luego afrontar ya la temporada de cross.

miércoles, 18 de septiembre de 2013

I Triatlón Media Distancia Desafío Islas Cíes

Esta semana no toca una crónica a pares, como os venía acostumbrando últimamente. Sólo competí un día, pero éste hizo por unos cuantos de los otros así que la crónica será larga. Aviso :-).
Y será larga, entre otras cosas, porque no quiero centrarme en las poco más de 5 horas que duró mi participación, sino que este Desafío Islas Cíes, para entenderlo tal y como lo viví, debéis conocer las raíces, al menos en parte.


Decía la semana previa a la prueba de que iba sin presión, que me lo tomaba como un regalo, como la guinda del pastel a un verano en el que había cumplido lo que me proponía.
Este año no fue demasiado bueno, o quizás si lo fue si lo miro en perspectiva, pero me tocó tomar decisiones difíciles allá por primavera, dar carpetazo a una situación que no me hacía feliz y empezar de cero. A pesar de que mucha gente lo critica voy romper una lanza a favor de Josef Ajram, hubo un concepto, el de 'stop loss', que se usa en la bolsa, que aprendí gracias a su libro. Desde entonces me ha ayudado mucho, para que veáis que al final se pueden aprender cosas en los lugares más insospechados.
Pero bueno, centrándonos en el tema.  Mi temporada de atletismo, que por cierto fue bastante buena, acabó en el mes de Junio. Aproveché un par de semanas que me duraba la forma y a partir de ahí desconecté. La verdad es que, cuando en Julio, pensaba que en apenas un par de meses tendría una cita con un medio ironman no hubiera dado un duro por mí.
Sin embargo como uno ya tiene experiencia y sabe identificar las prioridades, en ese momento la prioridad era descansar de la carrera. Nadar si que me apetecía y durante todo el verano nadé mucho, en días igual no tanto, 2 o 3 días/semana pero acostumbrado a nadar uno, semanas con 10 o 12 km de natación encima me parecían algo nunca visto. Y lo mejor es que me volvía encontrar bien en el agua, volvía disfrutar de los entrenamientos y me lo pasaba genial en las travesías.
Llegó Agosto y la cosa se puso más seria. En 6 semanas algo tendría que hacer...
Y me puse manos a la obra. Si me seguísteis ya lo vísteis, competí muchísimo: tris, travesías, una carrera por la playa y hasta un cuadriatlón y un descenso en kayak. Y cuanto más lo hacía más me motivaba, y mejores sensaciones tenía. Cada fin de semana era una experiencia que, lejos de agotarme, me llenaba de energía, no sólo en el plano físico sino en el mental. Me volvía a sentir fresco, con ideas,  con la sonrisa fácil y con muchas ganas de hacer cosas, como en los buenos tiempos. Vamos, como si estuviera enamorado pero sin chica je.
Al final esto del Desafío sirvió como zanahoria. Una vez leí a Galeano decir que la utopía vale para hacernos caminar. El valor real del Desafío no fue sólo el acabar la prueba, la alegría de cruzar la meta, la camiseta de finisher o la medalla; el verdadero valor fue el de servir de aliciente, el hacer que me pusiera en marcha.
Esto lo tenía claro antes de tomar la salida: el objetivo está cumplido, aquí tienes tu regalo, es lo que te gusta hacer, absorbe la experiencia a fondo y empápate de ella, disfruta de lo que te ofrezca.
Y con esta idea me levanté el Domingo a las 5 de la mañana, cogí el coche y me fui hasta Vigo, recogí mi dorsal y metí la bici en boxes. Todavía de noche, me enfundé en el neopreno. Encontré amigos y caras conocidas, bajé a la arena y esperé a que todo diera comienzo.



***

El mar estaba en calma, el agua fresca, aunque no tanto como la semana pasada. Unos tímidos rayos de sol comenzaban a despuntar por encima del horizonte. 
Éramos casi 500 participantes. El circuito es sencillo, ir hasta una boya situada a 900 m, virar a la izquierda en busca de otra situada a 100 m y volver a la orilla.
Estoy tranquilo pero no me gustan las esperas, prefiero ponerme en marcha.


Salida nula y a la segunda va la vencida. El principio de una mañana muy larga.



Le tenía miedo a tanta gente en el agua pero, al final, casi fue mejor de lo que esperaba. Durante la ida llevé algún golpe pero íbamos bien enfilados hacia la boya y no tuve demasiados problemas. Digo demasiados porque alguno si que tuve, con el tonto de turno. Resulta que íbamos un grupo nadando en paralelo bien enfilados hacia la boya cuando nos viene otro triatleta a cortarnos la trayectoria. Como yo era el que iba más la derecha, al primero que cortaba era a mí, y además me empujaba, me daba golpes, y me hacía chocar con el nadador que llevaba a mi izquierda. Vamos, un gilipollas, ni nadaba él ni dejaba nadar. Pues bien, voy a confesaros una cosa, despues de intentar que corrigiera con algún toque, tanto me hartó que es la primera vez que le doy a alguien un recadito en el agua queriendo y con intención. Soy bastante tranquilo pero que no me busquen las cosquillas, que las tengo. Por cierto, remedio eficaz.

Sin otro tipo de contratiempo alcanzamos la primera boya, la segunda y vuelta a la playa. Nadando muy cómodo y relajado, disfrutando ahora sí, del mar, del sonido del agua, del rojo del cielo y de la tranquilidad de la mañana.


Nado hasta que todo la arena con la mano. Me levanto sin prisas y salgo del agua andando, mientras voy quitando el neopreno. Buen parcial para mí 39'52" (273º) teniendo en cuenta que la alfombra del chip estaba arriba de la playa.


***

Las transiciones tradicionalmente son tradicionalmente un punto flojo, y sin embargo, en esta ocasión, me salió una de las mejores transiciones que recuerdo. Debió ser porque no tenía prisa que el neopreno salió enseguida, tardé poco en ponerme calcetines y calzarme. 1'23", ver para creer. Ya podía hacer lo mismo en los sprints.


Seguimos. Ahora por delante tenía supuestamente 90 km de bici, aunque luego el circuito sería algo más corto.
Este año no había hecho nunca 90 km en bici, ni 80 y hasta creo que ni 70. En Julio hice unas cuantas salidas de 60 y pico pero nada más. Le tenía algo de miedo a esta parte, precisamente porque era un circuito muy llano y era fácil dejarse llevar y pasarse de revoluciones.


Yo calculaba que si no soplaba viento podía moverme en una media de unos 30 km/h, y más o menos por ahí anduve. Intenté regular en todo momento. En la primera fui muy cómodo aunque apreté algo más de lo previsto para entrar en calor, que a esas horas aún hacía algo de fresco, pero enseguida el sol subió en el horizonte y se agradecía ir con poca ropa.
El circuito, la verdad, no me pareció mal, 4 vueltas es algo aburrido pero bueno, en algún tramito se veía el mar y la zona más cercana a meta estaba bastante animada así que se llevó bien. Yo no tengo queja.
Además, aunque no lo utilicé, de esta forma había la posibilidad de avituallarse hasta 4 veces. En mi caso levaba todo encima, una barrita casera y un Mars, que al final resulta ser lo que mejor me va en la bici, sabe bien, entra muy bien, se encuentra en cualquier supermercado y por el precio de una barrita típica de cualquier marca tienes un pack de 4 barritas de Mars. Y que conste que no tengo ningún interés en la marca (acepto patrocinios jaja), pues incluso en la vida diaria no las consumo nunca (soy de chocolate negro), sólo en la bici.


Bueno, el caso es que tenía claro que tenía que hacer mi carrera y olvidarme del resto. Así lo hice y creo que bastante bien. Tuve una crisis en la tercera vuelta que se solucionó al tomarme un gel y luego noté el hecho de no estar acostumbrado a la postura. No le saqué todo el partido que podría haberle sacado al acople y acabé con dolor de cuello y hombros pero bueno, dentro de lo que cabe bastante bien. Al menos sé que mi parcial es mío y que respeté en todo momento las normas del no-draft. Ser honesto con los demás es conveniente y recomendable pero serlo con uno mismo es obligatorio. Allá cada cual, ya está todo dicho y se ha hablado del tema hasta la saciedad.. Quien chupó fue porque quiso. Punto.
Al final 2h52'01" (358º) para unos 86,5 Km, media de 29'8 Km/h por mi cuentakilómetros y todavía muy entero. Miniobjetivo cumplido. Suma y sigue.





Otra transición rápida en 1'28" y vamos al tercer acto de esta historia. 21 km por delante aunque al final resultaron ser menos. Las dificultades estaban en el calor, y en que ya llevábamos más de 3h30' compitiendo. Correr siempre es mi mejor segmento, salvo en Sanabria, pero esta vez no llegaba ni muy en forma ni muy sobrado de kilometraje. La clave estaba en gestionar bien el esfuerzo y el plan era correr todo el rato que pudiera. concediéndome los avitullamientos como refresco para beber con calma. Estas pruebas son largas.
El circuito no es que fuera una preciosidad, en una parte había atasco de coches y era incómodo correr a su lado, pero en la zona más próxima a meta el ambiente era espectacular, de lo mejor que he visto, muy emocionante. Los voluntarios también, superatentos y animándote cada vez que te los encontrabas. De esta forma las 4 vueltas se hicieron bastante llevaderas.



Si quiero agradecer a los que animaban desde los coches atrapados en el atasco, gracias por tomároslo así. No faltaron los típicos maleducados que se ponían a protestar por todo pero en general todo el mundo genial.
Los kilómetros fueron pasando y yo corría sin pensar en el final. En cada vuelta mi meta era el siguiente puesto de avituallamiento y así me lo tomaba. No pensaba en nada más.


Tuve un contratiempo en la segunda vuelta con un gel de la organización, el que llevaba yo, por no variar, lo perdí. Al poco de tomarlo me comenzó a doler la barriga, y me acordé de 2 buenos amigos que en una Vig-Bay tuvieron que hacer una 'parada técnica' en un descampado. Al final la situación no llegó a ese extremo y se me pasó.
Salvo en los avituallamientos que me ponía a caminar para beber con calma el resto del recorrido lo pude hacer entero corriendo. Sólo en la última vuelta  tuve ganas de parar, no sé si fue por encontrarme a gente que caminaba, pero al final la meta estaba cerca y como pronto venía un terreno de bajada pude resistir a tentación.


De todas formas disfruté de unos últimos metros muy bonitos. No llevé cronómetro ni sabía cuanto tiempo llevaba de prueba pero me daba absolutamente igual. Le choqué la mano a los niños, le di un beso a Mónica y otro a Rita, aplaudía a los que me aplaudían y entré a meta feliz, dando un salto, tocando el marcador al más puro estilo Alhasan y con una gran sonrisa en la boca. Pues sí, conseguido, guinda del pastel.




Al final parcial de carrera de 1h40'41" (evidentemente no llegaba a 21 km, ni siquiera a los 20) (243º) que doy por bueno por haberlo disfrutado, gestionando bien mis fuerzas y sólo sufriendo lo justo al final.
5h17'31", puesto 303º.  Mi 3ª prueba de media distancia tras Sanabria y el Aviaman. 
Vuelvo decir que no son mis distancias, pero de vez en cuando una experiencia de estas merece mucho la pena, aprendes a conocerte y te puede aportar mucho en el plano personal si de verdad lo sabes aprovechar. Hay momentos que de verdad no tienen precio. A veces creo que cuando las competiciones son un poco largas sacan a la luz la verdad de las personas, a los ruines los muestra ruines, y a los grandes  más grandes. El domngo hubo personas que me parecieron muy grandes y otras que me dieron pena. Y que conste que no juzgo a nadie, cada cual que aguante lo suyo. Repito, yo fui a lo mío y la experiencia mereció mucho la pena. La organización me pareció de lo más correcta, salvo la medición de las distancias el resto todo OK.

Por la tarde me quedé un rato en la playa, tumbado en la arena, a la sombra, que al sol no lo soporto, saboreando lo vivido. Se estaba estupendamente, con la tranquilidad propia de septiembre, pudiendo escuchar las olas y el mar, agradecido por estar en ese momento y en ese lugar.
Ahora se acaba mi temporada, ahora comienza mi verdadero Desafío. Mayor que el Islas Cíes, que es sacar adelante mi propia empresa. Nuevos retos por delante, también el del curso de monitor de atletismo ¡Allá vamos!

Clasificaciones (completas aquí)
Masculina
1º  Jose Manuel Pardo Muralla Lugo 3:59:36
2º Manuel Figueira  Natación Riveira  4:00:25
3º Manuel Jesús Gayoso  Muralla Lugo 4:01:16

Femenina
1ª Aida Valiño Wildwof Lugo Fluvial 4:13:30
2ª Tatiana Domínguez  Motobike Pontevedra 4:48:46
3ª Almudena Vázquez  Mar deVigo  4:54:43

Fotos; José Manuel Pérez 1, 2 y 3; Agustín Soneira, Portela MTB 1 y 2; Safarstudio

miércoles, 11 de septiembre de 2013

V Triatlón de Ponte Nafonso y II Travesía a nado R.C.M. Aguete

Me estoy acostumbrando a hacer ya las crónicas a pares.
La primera parte transcurrió el sábado por la tarde en una pequeña localidad al lado de Noia. Ponte Nafonso se llama. El nombre se lo da el puente de origen medieval que une las dos orillas del Tambre y que fue mandado levantar por Alfonso IX de León.
El sitio la verdad es bastante bonito, muy tranquilo, y para hacer un triatlón es estupendo. No es la primera vez que se corría en este lugar, a principios de la década pasada se disputó varios años una prueba por equipos aunque en realidad el primer contacto con este deporte se remonta a un tríatlón popular organizado en el año 92. La prueba luego no tuvo continuidad (se corrió en el 92 y en la 93) por el desgraciado fallecimiento de su alma máter al año siguiente. Es por eso que este 5º triatlón de Ponte Nafonso se denomine también 'Memorial Michel' en su recuerdo.
Yo era la primera vez que visitaba la zona y me gustó. Además del entorno, la prueba en sí estuvo muy bien organizada. No es que tuviera unos boxes espectaculares o un gran despliegue de medios, tenía algo mejor y que ya no se encuentra tan a menudo: ganas de agradar al participante. Cuando ves que las cosas se hacen con ese interés se nota., el encanto de lo familiar lejos de franquicias y nombres rimbombantes.

Un animador de lujo en esta ocasión

Los 4 'bearices' examinando el circuito de natación
La salida de la natación fue lo único que no me gustó. Se salía desde el agua pero pegados a un pantalán que casi me rompe el neopreno. Después la cosa ya fue bien, salvo por un manotazo que casi me arranca las gafas. Hay cosas que ya son a mala leche, que no me fastidien, el contacto es inevitable pero hay gente que parece que lo hace a propósito.
Fue un poco antes de la primera boya, o banderola mejor dicho. a partir de ahí me tocó nadar con agua en un ojo pero podría haber sido peor, si llevara gafas suecas me iba quedar la cara bonita.


Gracias a las banderolas y a que las boyas no estaban muy alejadas unas de otras la orientación fue fácil y me salió una natación bastante decente. Seguramente no llegara a tener la distancia pero estuvo bien; 13'09" y ya estaba fuera del agua. Una vez más junto a mi compañero Marcial que este año salimos juntos en todas.


La transición no era muy larga pero si un poco complicada, porque había que subir por una rampa de piedra y eso con calas es un problema (si, aún tengo pendiente comprar unas zapas de triatlón)



Despacio y con cuidado todo se lleva bien, una vez arriba ya montamos.
Por delante 4 vueltas a un circuito circular de 5 Km pasando por el puente que da nombre a la villa. Un recorrido bastante entretenido con un tramito inicial que picaba hacia arriba y otro muy rápido de terreno favorable. El asfalto era un poco irregular pero quizás la mayor molestia fuese por el viento en el tramo del puente. De todas formas, desde el día de la bajada del alto da Groba, ya estoy curado de espanto en lo que se refiere al viento, lo del sábado a su lado una brisilla.


Empecé bastante bien, pillando un buen grupo para hacer la parte más favorable a un buen ritmo. Con buenas sensaciones en las piernas y ganas de irme hacia arriba.


En la segunda vuelta, en la parte de subida, dejé atrás al grupo y enganché a otro que iba por delante. En la tercera lo mismo, dejé a mis eventuales compañeros en la subida y me fui en solitario. Aquí me dobló la cabeza de la prueba, un pelotón de 10-15 unidades.


El problema llegó en la parte favorable de esta vuelta, cerca ya del puente. Un tramo muy rápido en el que noté como se me bloqueaban los pedales. En uno de los botes por los baches se había salido la cadena del último piñón.
La vuelta anterior ya me había dado un aviso con un salto de piñón pero ahora se había salido quedándose trabada entre el cuadro y la rueda. 
Tocaba enguarrarse las manos. Al principio intentas siempre tirar de ella pero no queda otro remedio que desenganchar la rueda, quitarla y volverla colocar.
En teoría no es una operación que lleve mucho tiempo pero metidos en carrera a mi me pareció eterna ¡Que rabia ver pasar a la gente que había dejado atrás en la subida mientras estaba parado en la cuneta!
Pero este deporte tiene estas cosas y aún menos mal que pude seguir. 
Volví montar y ya acabando esta tercera vuelta e dobló otro pelotón bastante numeroso. Como ellos ya desmontaban tuve que frenar. Una pena porque si no fuera por lo de la cadena estos si que no me hubieran doblado.


De todas formas lamentarse sirve de poco así que, con las manos llenas de grasa, intenté echar el resto para completar  la bici. La última subida fue bastante bien pero luego en la bajada ya no me atreví a meter el piñón más pequeño por miedo a que me sucediese lo mismo.
Ya el desarrollo que llevaba se me quedaba algo corto, sin poder meter el 13 mucho peor pero bueno. 
Con todo esto no es de extrañar que me saliera un parcial muy flojo 44'03". Por el cuentakilómetros 41'28", media de 29'4 Km/h y máxima de 46,8.


Restaba sólo la carrera a pie, también 4 vueltas pero aquí creo que eran más de 5 Km.


Me encontré bastante bien, corriendo cómodo y relajado.


No tengo queja, en general me vi adelantando gente.


Desdoblándome de la ganadora femenina


21'56" acabando con mucha fuerza, y evitando adelantar al final a un grupo, que celebraba su entrada en meta, porque no era plan.


En total 1h19'08", puesto 69º (me gusta jeje)
Lástima del incidente de la bici que me hubiera salido un triatlón muy bueno.
Al final del tri, algo que ya es difícl de ver hoy en día, tremendos pinchos para todos. Hasta empanada de pulpo, mira que hacía tiempo que no la comía. Para nota.

Clasificaciones (completas aquí)
Masculina
1º Nicolás Domínguez  Arcade Inforhouse  1:02:15
2º Jose Manuel Pardo  Muralla 1:02:20
3º Andrés Cendán Dexter Compostela  1:02:57

Femenina
1ª Irene Serrat WildWolf Fluvial 1:14:19
2ª Mar Villar CT Morrazo 1:18:29
3ª Sara Rial Dexter Compostela 1:18:57

Fotos: Julia, organización

Al día siguiente completamos la otra parte del fin de semana participando en la II Travesía a nado RCM de Aguete. 3.400 m cruzando la ría de Pontevedra desde Raxó hasta el puerto de Aguete.

Con estos 2 cracks que están preparando los 10 km de Coruña

Ya había participado el año pasado y me gustara mucho así que repetí. Este año por una parte fue aún mejor aunque tuvo también su anécdota.
Resulta que el traslado de los participantes se hizo en barco, en un bateeiro, en vez de autobús como el año pasado. Por supuesto así mola mucho más, más rápido, más divertido y toda una experiencia pero...
¿Que pasó? que nos interceptó la patrullera de la Guardia Civil y nos retuvo dentro del barco a la llegada a Raxó. Cosas que pasan.
En teoría estos barcos no pueden transportar pasajeros pero bueno, ni es la única travesía a nado donde los participantes son transportados en bateeiro ni parece una cosa tan grave, aunque ya se sabe que en este país somos muy tiquismiquis para unas cosas y cerramos los ojos ante otras. No sé en que quedaría el asunto.
Al final nos dejaron desembarcar y la travesía tuvo lugar. 120 nadadores, agua a 14º y un par de valientes sin neopreno.
La travesía no empezó muy bien para mí por cuanto no había dado ni las primeras brazadas cuando me di cuenta de que me entraba agua en las gafas. Como la distancia era bastante larga decidí parar, sacarlas, vaciar el agua y volverlas colocar. Debía llevar en torno a 200 m de travesía cuando realicé la operación y cuando acabé me di cuenta de que por detrás no había nadie.
-Ufff
Afortunadamente el grupo no estaba lejos y pude encontrar compañía.
Lo más difícil de esta travesía para mí es la orientación. En teoría es fácil, una línea recta, desde la salida se ve la meta perfectamente, había 2 boyas de referencia, había kayaks, tablas de padel... pero a mi me cuesta mucho saber hacia donde voy, ¿enfilo bien o voy desviado?
El mar estaba completamente en calma pero el sol brillaba y se reflejaba en el agua. Necesito unas gafas más oscuras para días como este.
En la primera parte de la travesía fui en un grupo con otros 2 nadadores, fiándome de ellos. No exactamente por detrás, ya que tocar pies es bastante molesto, sino a un lado.
Hasta ahí bien, disfrutando de la travesía y del nado. Sin pasar frío gracias al gorrito de neopreno. Sólo en la mandíbula notaba esa sensación como dormida.
La cosa cambió unos metros más adelante cuando se unió a nuestro grupo otro nadador que era, perdonadme la expresión, un auténtico tocahuevos. Toda la Ría para nadar y el tío dale a cerrarme contra el compañero de la izquierda.
Pues nada, mi paciencia acabó por agotarse y me fui hacia delante abandonando toda compañía. El problema es que ahora no sabía a donde iba. Las referencias de frente eran borrosas, las boyas no las veía, el resto de nadadores tampoco, y los que veía iban muy desperdigados. Lo único que se me ocurrió fue seguir a un kayak y eso es lo que hice.
Al principio bien, o eso pensé, pero llegó un momento que el kayak que le tenía puesto el ojo hizo una maniobra extraña, para mí que fue a reconducir a algún nadador desorientado y me despistó totalmente.
Intenté buscar otra referencia, las boyas ni rastro pero ví a otro nadador unos 10 m más adelante.
-Vale, de perderse, mejor que no sea solo.
Lo seguí, me pegué a él como a 5 m y no fue muy complicado guiarme. Lo malo fue cuando pasados unos cuantos minutos veo que se para en el agua.
Yo me detengo también, me pregunta e intento balbucear una respuesta porque no tenía sensibilidad en la mandíbula.
 - Por allí
No quedaba mucho de travesía pero la entrada a meta desde el agua no se veía nada clara. nos habíamos desviado bastante a la derecha parece.
Como el año pasado, esta última parte me costó, nadar con la tensión de no saber si vas en la buena dirección cansa. Cuando vi el barco que hacía de meta ya pude nadar más relajado.




Al final según los tiempos de la organización 1h12'14", 99º. No sé si estará bien, porque tiene muchos errores, pero en todo caso bastante mal por cuanto el año pasado hiciera 1h10' confundiéndome también al final. Teniendo en cuenta  que este año por los tiempos que hago en piscina estoy nadando bastante mejor no es para estar muy satisfecho pero claro, las aguas abiertas tienen estas cosas, al no orientarse bien a saber cuantos metros haría.
De todas formas contento, una travesía más, 2ª vez que cruzo la ría de Pontevedra y la verdad es que es una prueba para repetir: salvo los tiempos, muy bien organizado, buen trato, pinchos, buen ambiente
Lo de ir en barco me gustó, ojalá no les pongan problemas y para el año lo volvamos hacer así.

Clasificaciones (completas aquí)
Masculina
1º Jesús de la Fuente 42:14
2º Antonio A. Seoane  47:51
3º Jacobo Ucha  47:54

Femenina
1ª Sonia Pariente  50:31
2ª Bogna Mazur  52:21
3ª Nuria Multiba 58:50

Fotos: dropbox,

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